El envejecimiento de la población en China avanza rápidamente, y en 2025 se espera que se jubile la generación nacida en 1964, quienes han disfrutado del crecimiento económico de las últimas décadas y cuentan con pensiones estables y tiempo libre. Este grupo, conocido como “adultos mayores activos”, posee una capacidad adquisitiva significativa y un interés creciente en productos y servicios que mejoren su calidad de vida. A diferencia de los ancianos de mayor edad, son consumidores informados y abiertos a adoptar nuevas tecnologías.
La experiencia de Japón ofrece una visión de futuro: allí, las personas mayores de 60 años poseen el 35 % del efectivo disponible y acumulan importantes activos financieros. Aunque China aún carece de datos directos comparables, es evidente que los adultos mayores chinos, propietarios en su mayoría de viviendas sin hipotecas y con ingresos estables, tienen un peso importante en las decisiones de consumo familiar.
Las marcas que quieran captar a este segmento deben enfocarse en productos que fomenten la socialización, promuevan la salud y aborden necesidades emocionales. Además, el ecommerce en China es una vía efectiva para llegar a estos consumidores, quienes cada vez son más digitales.